Hikikomori en pleno 2021
Hay un gran grupo de personas cuyas vidas no se ven afectadas en absoluto por la cuarentena porque se han distanciado socialmente durante años y encerradas voluntariamente en apartamentos. Son ermitaños en el siglo 21. Este fenómeno comenzó en Japón y su difusión está más allá de nuestra imaginación.
El aislamiento de la realidad es una psicopatología presente en los individuos que sienten presión por la propia sociedad; su conducta de aislamiento hace que se sienta incapaz de cumplir con los roles que la colectividad espera de él.
Al sentirse aisladas, las personas cambian totalmente su personalidad, se vuelven más susceptibles ante los ataques externos, es por eso que buscan refugio en su espacio (aislamiento) para sentirse seguros de todo tipo de agresión.
Al salir de su zona de confort, la persona aislada se siente indefensa ante el mundo. En la mayoría de los casos; estos individuos aislados se vuelven codependientes, inseguros y en el mayor de los casos depresivos.
El aislamiento hace que la persona rompa comunicación con su entorno; por tanto, se convierte en un hombre ensimismado, con pocas facultades comunicativas y con escaso criterio de juicio.
¿Qué es el Síndrome Hikikomori o Síndrome de la Puerta Cerrada?
Se considera hikikomori a aquellos que se quedan en casa al menos seis meses y solo salen a comprar artículos de primera necesidad.
El problema del individuo aislado comenzó en Japón con los «Hikikomori», a raíz de las presiones sociales que se le imponían a los jóvenes, con ánimos de que éstos fueran unos seres exitosos ante la sociedad.
Pero esta problemática ha salido de las fronteras niponas y se ha esparcido por todo el globo terráqueo; causando estragos en la población juvenil mundial.
Muchos de los jóvenes que no han encontrado la ayuda necesaria para salir de estos muros del silencio, han optado por ponerle fin a la tira de problemas que atraviesan, ¿cómo?, atentando con sus propias vidas.
Por eso, el aislamiento personal es un tema grave que debe llamar la atención no sólo del sujeto que se encuentra en esta condición sino que también de los familiares y amigos que conozcan las condiciones de retiro en las que se encuentra el individuo.
Si es su caso o conoce personas que están pasando por esta situación, es importante que busque ayuda médica. La solución al Hikikomori es posible solo si se atiende a tiempo este tipo de alteraciones sociales y familiares.